Mini Cheesecakes de Frambuesa: pequeños, cremosos y deliciosos

hace 6 meses · Actualizado hace 4 meses

receta mini cheesecakes de frambuesas

Hay algo encantador en los postres individuales. Son fáciles de servir, se ven preciosos y, lo mejor, te hacen sentir que cada porción fue hecha especialmente para ti. Estos mini cheesecakes de frambuesa son todo eso y más: cremosos, con una base crujiente y ese toque ácido y dulce que le da la frambuesa. Además, no necesitas experiencia ni moldes raros. Solo ganas de pasarlo bien en la cocina y un molde para cupcakes.

La primera vez que los hice fue para una merienda con amigas. Quería algo que pareciera sacado de una pastelería, pero sin tener que pasar horas cocinando. Y estos mini cheesecakes fueron el acierto total. Lo mejor es que no necesitas batidora profesional ni técnicas complicadas. Solo mezclar, hornear y dejar que el frío haga su magia. Así de simple, así de rico.

¿Y por qué frambuesas? Bueno, son el equilibrio perfecto para la cremosidad del cheesecake. Aportan un frescor que corta la dulzura justa, y además se ven preciosas. Pero si no tienes frambuesas, no pasa nada: puedes usar mermelada, frutos rojos congelados o lo que tengas a mano. Es una receta muy agradecida, ideal para ir ganando confianza si estás empezando en esto de la repostería.

Así que si te animas a probar algo nuevo, sin complicarte la vida pero con resultado de aplauso, estos mini cheesecakes son para ti. Te guiaré paso a paso para que los prepares como todo un chef casero. En Quereceta.com nos encanta compartir recetas que te hagan sentir capaz, feliz y, sobre todo, con ganas de volver a la cocina una y otra vez.

Cómo hacer mini cheesecakes de frambuesa fáciles y deliciosos

Hacer mini cheesecakes de frambuesa en casa es mucho más sencillo de lo que parece. Lo primero que debes saber es que el secreto de un buen cheesecake está en la textura: cremosa, firme y sin grumos. Para lograrlo, utiliza un buen queso crema a temperatura ambiente y no batas de más cuando integres el huevo.

Otro truco importante es la base de galletas. Asegúrate de presionarla bien en los moldes para que no se desarme al desmoldar. Y al hornear, recuerda que no necesitas un horno muy fuerte: una cocción suave ayuda a que los mini cheesecakes queden lisos y sin grietas.

Una vez horneados, el toque de salsa de frambuesa le aporta el contraste perfecto entre el dulzor del cheesecake y la acidez de la fruta. ¡Cada mordida es una explosión de sabor!

receta mini cheesecakes de frambuesas

Mini Cheesecakes de Frambuesa

David Cruz
Los mini cheesecakes de frambuesa son una opción ideal para preparar postres individuales con presentación profesional y sin complicaciones. Esta receta casera combina una base crujiente con un relleno suave y cremoso, coronado con una capa de frambuesa fresca que aporta contraste y color.
Tiempo de preparación 20 minutos
Tiempo de cocción 4 horas
Plato Aperitivo, Postre
Cocina Americana, Francesa, Italiana
Raciones 12
Calorías 250 kcal

Ingredientes
  

Para la base:

  • 150 g de galletas tipo Digestive o María
  • 60 g de mantequilla derretida

Para el relleno:

  • 300 g de queso crema tipo Philadelphia, a temperatura ambiente
  • 100 g de azúcar
  • 2 huevos
  • 100 ml de crema para batir nata para montar
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • 1 cucharadita de ralladura de limón opcional, pero le da un toque fresco

Para la cobertura:

  • 100 g de frambuesas frescas o congeladas
  • 2 cucharadas de azúcar
  • 1 cucharada de jugo de limón

Elaboración paso a paso
 

Prepara la base

  • Tritura las galletas hasta que queden como arena fina.
  • Mézclalas con la mantequilla derretida hasta tener una textura húmeda.
  • Coloca capacillos (papelitos) en una bandeja para cupcakes y reparte la mezcla en el fondo de cada uno, presionando con una cuchara.
  • Lleva al congelador mientras haces el relleno.

Haz la mezcla de cheesecake

  • En un bol, bate el queso crema con el azúcar hasta que quede suave.
  • Añade los huevos uno a uno, mezclando bien.
  • Incorpora la crema para batir, la vainilla y la ralladura de limón.
  • Bate hasta tener una mezcla lisa y sin grumos.
  • Reparte sobre las bases de galleta, llenando casi hasta el borde.

Horneado

  • Lleva al horno precalentado a 160 ºC (320 ºF) durante 20-22 minutos, o hasta que el centro esté casi firme (tiembla un poquito, pero no está líquido). Apaga el horno y deja los cheesecakes dentro con la puerta entreabierta por 10 minutos.
  • Luego, sácalos y deja enfriar a temperatura ambiente.
  • Después, refrigera mínimo 4 horas (mejor de un día para otro).

Prepara la cobertura de frambuesa

  • En un pequeño cazo, calienta las frambuesas con el azúcar y el jugo de limón hasta que se deshagan un poco y espesen.
  • Puedes dejar los trocitos o colarlo si prefieres una salsa lisa.
  • Una vez fríos los cheesecakes, añade una cucharadita de esta salsa encima de cada uno. ¡Y listo!

Video

Notas

Si es tu primera vez haciendo un cheesecake, esta versión en tamaño mini es la mejor forma de empezar. No necesitas molde desmontable ni experiencia previa: con un molde para cupcakes y papelitos ya puedes lograr un postre que parece de pastelería. Además, puedes variar el topping según lo que tengas: frambuesas, fresas, arándanos o hasta mermelada. Lo más importante es que respetes el tiempo de horneado suave y el reposo en frío. ¡Eso hace toda la diferencia!
Keyword Azucar, Galletas, Mantequilla

Perfectos para cumpleaños, meriendas o como postre elegante, estos pastelitos son fáciles de hacer y conquistan desde el primer bocado.

Consejos para que tus mini cheesecakes de frambuesa queden perfectos

Para que tus mini cheesecakes de frambuesa sean un éxito total, sigue estos consejos sencillos:

  • No sobrebatas la mezcla de queso crema para evitar que se agrieten.
  • Usa moldes de silicona o cápsulas de papel para facilitar el desmolde.
  • Deja enfriar completamente antes de agregar la salsa de frambuesa.
  • No hornees de más: cuando el centro aún tiemble ligeramente, es momento de sacarlos del horno.
  • Refrigera al menos dos horas antes de servir, para que tengan la textura cremosa ideal.

Siguiendo estos pasos, vas a lograr mini cheesecakes suaves, brillantes y con una presentación espectacular. ¡Son perfectos para cualquier ocasión!

Tip #1: No sobrebatas el queso crema

Cuando mezcles el queso crema con el azúcar y el huevo, hazlo a velocidad baja. Si bates demasiado, incorporarás aire a la mezcla y los cheesecakes podrían agrietarse al hornearse. Lo ideal es que la mezcla quede suave, pero densa.

Tip #2: Usa moldes de silicona o cápsulas de papel

Los mini cheesecakes son delicados. Utilizar moldes de silicona o cápsulas facilita muchísimo el desmolde, evitando que se rompan o se peguen al molde tradicional.

Tip #3: Deja enfriar completamente antes de decorar

Aunque te tiente ponerles la salsa de frambuesa apenas salgan del horno, es fundamental que estén completamente fríos. Así evitarás que la salsa se derrame o se hunda en el cheesecake.

Tip extra:

Si quieres un acabado más elegante, guarda algunas frambuesas enteras y colócalas encima justo antes de servir. ¡Se ven divinos!

Preguntas frecuentes del Mini Chessecake de Frambuesa

Esto es lo que me hubiera gustado saber de antemano antes de preparar mi primera receta que vi en YouTube, no es que halla sido un mal tutorial, solo que olvidó dar consejos y tips para que mejorara mi preparación.

¿Cómo evito que los mini cheesecakes se hundan en el centro al enfriar?

Ese hundimiento típico suele pasar cuando se hornean a una temperatura demasiado alta o si se enfrían bruscamente. Para evitarlo, hornea a baja temperatura (160 °C es ideal), y una vez listos, deja que se enfríen dentro del horno apagado con la puerta entreabierta unos minutos. Esto ayuda a que no sufran un cambio brusco de temperatura, lo que mantiene su forma más pareja.

¿Qué textura debe tener el cheesecake al sacarlo del horno?

Un error común es esperar que queden completamente firmes en el horno, pero no debe ser así. Al sacarlos, el centro debe temblar ligeramente como una gelatina suave, sin estar líquido. Eso indica que están cocidos pero aún cremosos. El frío terminará de darles cuerpo. Si los horneas hasta que estén totalmente firmes, quedarán secos al enfriar.

¿Puedo preparar la base con otro ingrediente que no sean galletas?

Sí, si quieres variar o evitar las galletas, puedes usar frutos secos triturados con un poco de miel o dátiles para darles textura y pegajosidad. También hay versiones con copos de avena o cereales triturados. Incluso puedes usar bizcocho desmenuzado si te sobró alguno. Lo importante es que la mezcla pueda compactarse bien al fondo del molde.

¿Se pueden hacer sin horno o en versión sin cocción?

Sí, puedes hacer una versión sin hornear. Solo cambia la mezcla de cheesecake por una versión con gelatina sin sabor o cuajada para que cuaje en frío. La textura será un poco distinta, más tipo mousse, pero sigue siendo una excelente alternativa. La base la preparas igual y simplemente refrigeras todo por al menos 6 horas antes de servir.

¿Por qué se me despega el papel del cheesecake al enfriar?

Esto puede pasar si los capacillos no son de buena calidad o si la mezcla tenía demasiada humedad. Para evitarlo, usa capacillos reforzados o moldes de silicona individuales. Otra opción es forrar el molde con tiras de papel de hornear. Y si ya se despegaron un poco, ¡no pasa nada! Puedes presentarlos en cucharitas o vasitos pequeños como postre más rústico pero igual de delicioso.

Y ahora que ya tienes todos los pasos, solo falta una cosa: que te animes a prepararlos. Estos mini cheesecakes de frambuesa no solo son fáciles y deliciosos, también son una forma bonita de compartir algo hecho por ti. Si los haces, cuéntame en los comentarios cómo te quedaron o con qué los decoraste. En Quereceta.com nos encanta cocinar contigo y ayudarte a disfrutar cada momento en la cocina. ¡Nos leemos pronto y feliz horneado!

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Mini Cheesecakes de Frambuesa: pequeños, cremosos y deliciosos puedes visitar la categoría Cheesecakes.

David Cruz

Soy David Cruz, un tipo que encontró en la cocina su forma de conectar con el mundo. No soy chef de libro, pero cada plato que hago lleva mis ganas de contar historias y despertar recuerdos. Cocinar para mí es un acto de cariño, un abrazo que llega directo al corazón. Aquí pongo mi esencia en cada receta.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Calificación de la Receta




Tu puntuación: Útil

Subir